A veces...
 deseo...
 derribar muros
 recorrer desiertos
 combatir a muerte
 sumergirme en abismos
 encabezar cruzadas contra la cobardía.

A veces...
deseo...
 no desear
 oficiar sacrificios
 romper mi puño en tu pecho
 perder la inocencia restante
 matar el comienzo por no ver el final.

A veces, solo a veces,
 cuando los ojos ven con claridad cristalina.
A veces, solo a veces,
 la certeza invade momentos presentes.
A veces, solo a veces,
 el a veces es frecuente y es por siempre.
A veces, solo a veces, conciliamos
 los reflejos del pasado
 los pasos del ahora
 los enigmas del futuro.

Y es que a veces, solo a veces,
es casi siempre demasiado poco. 

Y es que a veces, solo a veces,
 se detiene el minutero y el a veces se hace eterno.